HAIDER ACKERMAN, EL DISEÑADOR COLOMBIANO

Si alguno de ustedes me conociera por primera vez, no pensaría que soy un colombiano patrio; de esos que viven dentro o fuera del país y hablan de Colombia como si fuera una negada maravilla del mundo defendiéndole a diestra y siniesta. Yo no me enfado cuando hablan mal de Colombia; cuando le presentan como uno de los paises más peligrosos del mundo, ni como la gran exportadora de droga, ni de pitos ni de flautas porque, sólo el que conoce Colombia, sabe que es uno de los paises más bonitos del mundo.

Ahora, como colombiano de pura cepa, me emociono cuando algun paisano "saca la cara" por el país, como un padre viendo a su hijo anotar su primer gol en un partido de futbol o una madre orgullosa al ver a su hija con un listón de papel y escarcha en un reinado local. Es una sensación indescriptible, es un gozo interno e inspirador; es una voz que nos hace pensar que no existe lo imposible y que también nosotros podemos ser como ellos. Ese sentimiento es más colombiano que un jugo de corozo.

Además del terrorismo, los desastres y atentados que han acontecido en Colombia a lo largo de su historia como país (in)dependiente y que la han puesto en el ojo del mundo, muchos han sido los personajes que se han encargado de colocarle en el mapa por sus logros y han generado ese sentimiento en nuestro interior:
Gabriel García Marquez, premio Nobel de Literatura se mantiene después de casi 20 años de su logro como el escritor vivo más importante del mundo, haciéndonos soñar con el realismo mágico que atiborran sus libros. Manuel Elkin Patarroyo, pobre hombre que a pesar de ser el creador de la cura contra la malaria, sufrió el espaldazo y embargos a su laboratorio por parte de bancos nacionales y, sintiéndose exiliado se va a Europa donde recibe premios y le montan su laboratorio para el desarrollo de nuevas curas.
Edgar Rentería ha traido dicha a Colombia con su desempeño deportivo en el baseball, deporte que en Colombia 'ni fú ni fá' pero que ahí sigue 'dando palo', su último logro ha sido hacernos sentir grandes al ganar la Serie Mundial. Catalina Sandino nos hizo confirmar el talento nacional luego de ser nominada al Oscars por su papel en 'Maria llena eres de gracia'. De todas las transmisiones de los premios de la academia en Colombia, el año de su nominación fue la más sintonizada y aunque lo que vimos fue una derrota, estuvimos allí presentes con ella, victoriosos.

Pasado el tiempo, nos preguntábamos quién sería el próximo que pondría a Colombia en el mapa, y llega una platinada Shakira con canciones ultracomerciales inspiradas en sonidos latinos fusionándole con movimientos de caderas que no mienten y consigue enloquecer a los muchos arrítmicos mundiales que la convierten en megaestrella universal.  Y aunque yo no considero que Shakira ES la embajadora de Colombia por mucho que mencione el corozo y el arroz de lisa en sus entrevistas, su educación ha ayudado a mejorar la imagen que tienen por fuera de nosotros y hasta contribuye al turismo; son muchos los extranjeros que viene a buscar mujeres pensando que todas se mueven como la cantante.

En materia de moda -que es la intención de este escrito- hemos tenido estrellas (fugaces) que han llegado, brillado y se han ido.
Silvia Tcherassi, ACLAMADA diseñadora colombiana nos dió una alarmante bofetada para mostrarnos que con trabajo y dedicación SÍ era posible llegar a pasarelas de Europa cuando presentó su colección en Milán por allá en el 2004. Yo apenas me iniciaba en el mundo de la moda y lo recuerdo. Que una colombiana llegara a Milán era utópico. Los diarios en Colombia aplaudían el logro de la barranquillera, los noticieros la mencionaban a diario, las familias orgullosas izaban la bandera de Colombia e Italia en sus casas; le dedicaron exhibiciones, habían carnavales todos los días (porque ella fue reina de Carnaval), las mujeres imitaban su corte de pelo y las modistas imitaban el cuello de sus blusas. Después de presentar su colección, creo dos veces, no volvió a asomarse por Milán, abrió un hotel y poco es lo que se sabe de ella. Lo último comentado que hizo fue una línea de ropa económica para 'Éxito', una cadena de almacenes tipo Carrefour o WallMart en Colombia.

Cuando Tcherassi dejó de ser el referente principal de moda colombiana, nisiquiera nos preguntábamos quién sería la próxima sensación porque, llegar a Milán con los "diseñitos" que se hacen por acá, estaba dificil. De repente aparece Esteban Cortazar, bogotano conocido mundialmente, por ser el diseñador más jóven en presentar una colección en el Miami Fashion Week (tenía 13 años entonces). Cortazar no residía en Colombia y por eso nunca fue un referente patrio.
Cuando le conocí en el 2004, recuerdo haberme excitado tanto con unos vestidos HERMOSOS que vi en FTV  que inmediatamente grité "este tipo va a ser grande!" el especial era para talentos emergentes y recuerdo que su pasarela era en la playa al aire libre, algo muy miamesco para los que apenas se dan a conocer.
Después de trabajar duro por años en mantener su firma en pie, llega su momento cumbre: a Cortazar le proponen ser el director creativo de la casa francesa 'Emanuel Ungaro' y al día siguiente figuraba en todos los diarios, los noticieros se referían a él como el DISEÑADOR 'BOGOTANO', los niños diseñadores de moda dejaban de comer para igualar su peso, habian desfiles en las playas al mejor estilo Cortazar y todos felices celebrábamos alzando las manos al cielo.

Luego, lo terrible sucedió. Después de 6 colecciones presentables para la casa, le despiden para incluir a Lindsay Lohan como la nueva directora creativa. Ver cómo le quitaban el juguete a Cortazar para darselo a 'Lilo', ha tenido que ser de las patadas en los huevos más fuertes jamás recibidas en el mundo de la moda. Claro, los fines eran comerciales y Lindsay sólo aguantó una temporada por el comportamiento de tabloide al que tiene acostumbrado al mundo. Después de semejante tropezón en 'Ungaro', muchos esperaban que la firma replanteara y pidieran a Cortazar que regresara pero no, Cortazar siguió su camino y lo último comentado que hizo fue una una línea de ropa económica para Éxito, una cadena de almacenes tipo Carrefour o WallMart en Colombia.

Ahora los ojos parecen centrarse en Haider Ackermann, el tércero, el que tocará el cielo y nos dará los triunfos más grandes y abrirá la brecha para colombianos. O al menos eso esperan.

Ackermann era un total desconocido para muchos en el círculo de la moda colombiana aún cuando en el libro '100 Diseñadores Contemporáneos de Moda' de Taschen es el primero de la lista y su biografía inicia indicando que nació en Bogotá, Colombia. Aquí nunca se le había mencionado aún cuando comparte honores con Alexander McQueen, John Galliano, Miucca Prada, Karl Lagerfeld, Alber Elbaz y otros grandes.

Haider, que ha venido trabajando unas colecciones maravillosas y viste a personalidades como Tilda Swinton, se ha venido "calentando a fuego bajo", despacio pero seguro y poco a poco ha logrado notoriedad, sobretodo del 2008 para acá.
Hace un tiempo, "el kaiser" Lagerfeld dijo que vería a Haider como buen sucesor en Chanel y eso fue suficiente para hacer de Haider Ackerman la estrella de diseño de modas más importante que ha salido de Colombia porque, que un colombiano dirija Chanel sería más importante que 20 discos de Platino de Shakira. Chanel es Chanel! Y por eso desde ya, Haider Ackermann él es el colombiano más colombiano de todos y me encanta todo lo que ha generado en el país!

Me encanta porque ahora todos en Colombia creen saber quién es Haider Ackermann y lo mejor es escuchar frases maravillosas como "puro talento colombiano!" ó "tenía que ser Colombiano, yo sabía!". Me encanta porque las fotos que aparecen de Ackermann lo muestran tan sencillo, que pensamos que ha vivido toda su vida aquí, porque por mucho color que irradiamos, somos sencillos y él con su bigote, su pelo desenfadado y sus características gafas torcidas, imaginamos que es egresado de alguna escuela de Bogotá y "está en esa moda hipster". Me encanta porque muchos ignoran el hecho que Haider, de bebé fue adoptado una pareja belga y vivió en Francia un tiempo y no sabe hablar un pito de español ni parece interesado. Su único interés es su trabajo, como colombiano puro.
Yo quiero que sigan hablando de Ackermann, ojalá le asignen la dirección de alguna de las grandes casas de moda, sea Chanel, sea Dior, sea Givenchy; nisiquiera por ser Colombiano -que lo es sólo en ADN- sino porque de verdad su trabajo es maravilloso.

Ojalá el Huracán Ackermann dé para más tiempo y sigan corriendo rumores sobre qué casa lo fichará para así tener a bloggeros mencionándole y a la prensa nacional hablando. Y si es así, seguro el otro año tenemos a Haider Ackermann como invitado estrella en 'El Círculo De La Moda' de Bogotá, 'Colombia Moda' en Medellín y 'Plataforma K' en Barranquilla. Le permitirán presentar su colección de momento en modelos de estética mujer de narco: tetas 36D, nalgas paradas, abdominoplastia y más curvas que una guitarra acústica; gozaremos sus triunfos en el mundo de la moda tomando cerveza aunque algunos no sepan siquiera escribir su apellido y esperaremos con ansias que se lance la colección de la línea de ropa económica para 'Éxito', una cadena de almacenes tipo Carrefour o WallMart para poder decir "yo visto de Haider Ackermann, el diseñador colombiano que la hizo en Europa".