ANDROGINIA: LA MUERTE DEL SEXO

Chi Chi Rodriguez: Que quieres decir con "ser una drag queen"? Soy una Drag-queen.


Noxeema: Niña, no. tu eres simplemente un niño con vestido.


Como cuando un Hombre Hetero se coloca un vestido para divertirse sensualmente, es un travesti.


Cuando un hombre es una mujer atrapado en el cuerpo de un hombre y se hace la operación, es un transexual.


Cuando un hombre gay tiene mucho sentido de la moda para un género, es una drag queen.

To Wong Foo Thanks for Everything, Julie Newmar (1995)

Cuando tenía 6-7 años era un niño delgadísimo, de pelo lasio, ojos grandotes con largas pestañas y una voz delicada que por tel, creían que era de niña. Mi mamá vivía preocupada de lo que segun ella, podría ser mi futuro: una mujer; debido a que estas características físicas, iban acompañadas de una actitud algo pasiva. Y no en el sentido de jugar con muñecas o usar sus tacones -que nunca lo hice- sino que no hacía cosas de "un niño común y corriente": no jugaba futbol o a los carritos, no hacía deporte alguno ni era de esos niños salvajes de lodo y suciedad; por el contrario, era muy limpio y sensible. La mayor parte del tiempo me la pasaba leyendo sobre arte que no entendía, absorbiendo películas de las buenas o escuchando música de la mala. Según todos, yo era un "niño especial".

Ya pasado los años, la pubertad, los pajazos, el crecimiento del vello corporal y años de gimnasio pasando por mi, esa femeneidad que preocupaba a muchos parece haberse desvanecido un poco llevándose hasta un poquito aquella sensibilidad. Mi madre ahora vive aliviada y se nota cada que la saludo con el vozarrón grave que muchos dicen que tengo pero que yo no noto. No jugaba con carros pero hoy conduzco uno. No sé si es la testosterona o el consumismo que me afectó. Eso, o quiero vivir en una negación. No sé.

Menciono esto porque ultimamente me ha venido impactando la oleada esta de la androginia, -que es la facultad de ser chico y parecer chica y viceversa logrando un término medio- que parece venir para quedarse (un tiempo). Yo me he preguntado cómo me vería si hubiera preferido flexionar el género y verme entre mari y macho a machacarme en el gimnasio para parecer "un hombrecito". Pero no creo que hubiera soportado los comentarios en mi ciudad que, aunque no está preparada para la androgínia, está ganando adeptos.
Ya me he topado con varios que me han comentado un gusto por una exageración del estilo rozando con la femeneidad. No sé si sólo hablan por hablar pero, ya son más los curiosos con chicos que parecen chicas y chicas que parecen chicos.

Andrej Pejic. Tiene pene y testículos.

Dicen que la moda es un reflejo de la sociedad y la sociedad de hoy vive "la era digital". Con el internet como medio más importante de (auto)expresión, ahora todos nos creemeos expertos en el tema. Ya no son sólo las revistas, los blogs se encargan de informar qué es lo "in" y qué es lo "out" y uno en plan rebaño, sigue al pie de la letra. Y pues eso, lo "in" ahora es ser hermafrodita-androginita-marikita pero machito.

Lady GaGa, la primera gran estrella de la era digital, es tal vez una de las responsables de este fenómeno luego de ser catalogada como hermafrodita debido a un incidente en una presentación de la que se aprovechó y generó un -ya trillado- mensaje: "todos somos hermosos no importa cómo nos veamos, ya no importa que parezcas un monstruo (porque todos somos monstricos); con un fuerte sentido de la moda (???) y fuerza, puedes vencer adversidades". La respuesta fue increible y ha generado un cambio en el pensamiento de millones de personas que ahora optan por convertirse en quimeras que según GaGa "todos llevamos dentro desde que nacimos".
Estas declaraciones de libertad de expresión, de desinterés por moldear una identidad sexual, la han convertido en la vocera principal logrando que fans, no fans, blogs y redes sociales celebren y sigan al pie de la letra el manifesto de "la Madre Monstruo" y no sólo eso, sino que han conseguido re-establecer un canon de belleza en la moda.
Digo re-establecer porque la androginia es un tema que siempre ha estado presente en la moda y tal vez con mucha más fuerza que ahora, lo que pasa es que ahora es "edgy, nuevo y rebelde" y está masificado gracias el internet. Dicen que es algo innovador y fresco pero no es así. Lastimosamente, la nueva androginia es tan aburrida y superficial como una canción de (inserte nombre aquí).

Hablar de androginia en moda no es hablar de espontaneidad, porque en realidad hay un arduo trabajo en conseguir la estética deseada a través de cientos de estilistas que te decoran como les plazca, sin mencionar que los contratos firmados asegurarán apariciones públicas y "escandalosas", por ejemplo: Andrej Pejic cerrando el desfile de Jean-Paul Gaultier. No es de extrañar que Rihanna escogiera el vestido, que él usó, para ella llevarlo a los Grammy. Fue el más visto y comentado aquella temporada.

La diferencia de antes y de ahora es que, la androginia de ahora por alguna extraña razón sólo consiste en pieles pálidas, ropas de taches y estoperoles, sombras en los ojos, pelos desenfadados, pantalones apretaditos con los huevos y pene escondidos (a menos que sean de tamaños minúsculos), terminando el look con tacones que no llevan tacones y accesorizando con gafas pseudofuturistas. La mujer andrógena suele por naturaleza, no tener tetas así que es más facil todo el trabajo.
A pesar de haber un cuidadoso trabajo en el vestir, la androginia de ahora no es sexy, es tan artificial, tan insulsa y descafeinada que se aleja completamente de lo que en verdad debería evocar: erotismo. El juego de "no soy pero parezco, no tengo pero te puedo dar" desaparece por completo. No hay sexo en el sudor porque no hay sudor. No hay sexo porque no hay generos. Es como cojer con muñecos de plástico. La androginia es la salvación del eunuco.

Boy y George y Grace Jones, hembra y un macho respectivamente.

Y me puedo llenar de ejemplos de verdadera androginia, pero no le veo necesidad porque no quiero parecer enciclopedia pero, personajes como Grace Jones que, con su físico logró estética y visualmente una androginia pura que dudo alguien más alcance (nisiquiera David Agbodji  en el editorial de la Numéro inspirado en la propia Grace Jones, pudo igualar su masculinidad!) o Leigh Bowery, artista que se fue demasiado rápido y dejó a muchos gon ganas de más ó Boy George que con su cara ultramaquillada ponía a suspirar a hombres y mujeres combinándola con su delicada voz y su 'karma karma karma chameleon' ó Michael Jackson o hasta Juan Gabriel y Walter Mercado! Ellos siempre han estado allí, andrógenos puros, en las radios, tv y anuncios con una mirada profunda, un poder sexual alto y absurdo que parece faltar hoy en día.

En el mundo de la moda, se han destacado Linda Evangelista, Stella Tenant, Agyness Deyn que ahora es un especimen extraño, Freja Beha y hasta MariaCarla Boscono; modelos que no son de hace 2 años y aunque son chicas vestidas de chicos, logran evocar una sexualidad masculina tan impresionante que despiertan sensaciones en quien les observe. Parecen hablar como hombres, tocar como hombres y oler a sexo. Ahora el turno es para hombres amaricados que parecen hablar como mujeres, tocar como mujeres, ver como mujeres y huelen a Paris Hilton.
Para estos andrógenos modernos no existe el sexo. Muere en el pensamiento y se refleja en sus miradas en blanco. La muerte del sexo es tal vez la primera premisa de la nueva era, y aunque sabemos que todos lo hacen, nadie habla(rá) de ello.

Grace Jones que para mi es la representación pura (y si tengo que mencionarla aquí 473782 veces, lo haré porque este blog es mio) fue una attention whore de primera, y aunque muchos la tildaban de ridícula, logró llevar su androginia a una pansexualidad asboluta. Los de ahora parecen asexuales, disfuncionales y aburridos hasta con la prensa. Hasta Marilyn Manson tenía más gracia.

Mi posición no es de comparación porque no hay comparación. Estamos tan sumergidos en la era digital que absorbemos información tan rápido y sin masticar que, cuando nos damos cuenta, quedamos como una papa de lo mucho y nada que tenemos en la cabeza. Pero algo si es seguro: la nueva era está tan llena de pretensiones disfrazadas de naturalidad que incita a que todos nos sintamos naturales siendo artificiales al imitar una naturalidad artificial porque al parecer, ser andrógeno es natural, baby I was born this waaaay!

Los límites del género y sexualidad parecen desvanecerse cada vez más pero parecemos olvidarnos o no interesarnos en escarbar en el tema y nutrirnos con personas que de verdad lograron -nisiquiera en política- cambios en la estética o, con una pasión tan grande por su exterior, que terminan siendo sus propias obras de arte (no contemporánea!).

Algo pasa con los nuevos voceros de la androginia. Hasta el momento sólo se sabe de ellos por el internet (que es su principal fuente de fama) y uno que otro artículo dedicado en diarios donde dicen ellos dicen que lo ven como algo divertido porque, usar tacones, sombra y sostenes es divertido (entonces son travestis) y que lo hacen por el dinero (entonces son putas). Me gusta esa actitud realista de saber que están siendo usados pero se lucran y de no saber cuanto les va a durar el cuarto de hora. Ojalá de niño hubiera sabido que iba a ser un boom y hubiera tomado estrógenos para convertirme en la próxima estrella andrógena, le hubiera comprado una casa a mi mamá y ella suspiraría aliviada cada que escuchara mi voz maricona de zombie de sangre antiséptica, pero no. Lástima.

Temo que cualquiera que lea esto piense que tengo algo en contra de los supuestos andrógenos, pero no es así. Yo les admiro porque a pesar de ser vacíos, busca-atención y sin estilo, tienen los huevos de ser los que les da la gana, por dentro o por fuera y es gracioso, siendo que los andrógenos no tienen huevos. Es eso! creo que tengo problemas sólo con la etiqueta pero es que LOS MODELOS DE AHORA NO SON ANDRÓGENOS y me aburre que ahora todos parecen estar en la búsqueda de un look andrógeno, cuando no hay nada más increible que un hombre que parece hombre y una mujer que huele a vagina. Así que, intentar colocar una nueva etiqueta a estos engendros está dificil. Dudo que se puedan considerar drag queens, porque como dice la gran Noxeema Jackson al inicio del post, "ser drag-queen es tener mucho sentido de la moda para un género", sentido que reside en el gusto de los estilistas, entonces NO. Dudo que sean travestis porque aunque lo hacen por diversión, carecen de esa sensualidad real que los travestis suelen irradiar, asi que tampoco!. Entonces queda claro que, como no hay una etiqueta que les identifique acertivamente toca decir que son simplemente niños con vestidos y precisamente, esa es la más acertiva de todas.