Hablar del Versace de hoy en día es dirigirse al cajón a sacar las mismas frases: que ya no es lo mismo, que la firma debió ser enterrada con Gianni, que Donatella la ha destrozado; los mismos aforismos de siempre que, al parecer, nunca cesarán. Algunos, en plan videntes, dicen que si Gianni estuviera vivo, hubiera sobrevivido a los cambios que el mundo de la moda ha sufrido, reinventando aquel arquetipo de puta que él moldeó a su gusto. Algunos no piensan que simplemente no y punto. Que si estuviera vivo tal vez le hubieran enterrado así como muchos grandes maestros por tener un estilo que simplemente está outdated. Es sólo ver a Lacroix y su maravillosa mente. Gianni está muerto y el muerto, muerto está y Donatella ha logrado aún mantener Versace como una de las marcas más prestigiosas y recordadas por siempre jamás en el mundo, universo y constelaciónes.
Lo que pasa con Versace es que se ha convertido en esas casas que a sus colecciones se les adjunta el calificativo (gringo por supuesto) de 'hit or miss' algo muy celebrity así como 'la hiciste o la cagaste' en la alfombra roja pero como un general de colección.
Las últimas colecciones de Donatella sinceramente han sido un miss total y me preocupa documentarlo en mi tan apreciado y olvidado blog porque sé que en el futuro seremos amigos o al menos tendré una foto en plan blogger hablando con ella (de lo más artificial pero pretendiendo ser lo más natural) y diciéndole cuánto me ha gustado la colección pero hay que ser honestos, no sé qué mente retorcida se ha encargado de aprobar muchos de los pasos de las colecciones que Doni nos ha venido ofreciendo los al menos ultimos ___ años. Las colecciones han sido un poco feongas, mal ejecutadas y con faltas de inspiración; aún así, han facturado y eso es lo único que importa, no?
Hay que reconocer que Donatella por muy oxigenada, por muy fiestera que es o que aparenta ser, por muy desapegada de su hija anoréxica, es una experta en el bisnes (bussiness) y sabe vender a Versace de la mejor forma. Razón por la que se ha mantenido a flote. Donatella sabe que sus mejores clientes más que las hijas o esposas de magnates, son las celebridades. Esto no significa que las celebrities maten por un Versace o lo usen todo el tiempo, no, pero sabe que cuando una se enfundan en uno, brillan. Donatella lo hace esperando el momento preciso y lo consigue.
La última persona que hizo una explotación meteórica de los trajes Versace fue la tan ya mencionada en éste blog: Lady GaGa. Lo interesante fue que el apropio de la cantante no fue del actual Versace, sino el de antaño, el de Gianni, y gracias a los estilismos que les creó su estilista, Nicola Formichetti (ex amigo mio) y la inmortalización en su video The Edge Of Glory, controversial por su riña con el gran Joseph Khan, director de Stronger de Britney Spears, los trajes de Versace volvieron a capturar la atención de muchos adeptos a la moda y claro, tenga que Donatella lo aprovecha y saca una colección con aire al Versace de antaño.
En un momento donde el diseño italiano estaba perdiendo un poco la identidad, viene Donatella y el duo de D&G y traen un poquito de ese sabor que tanto tenían olvidados. Por lo menos D&G lo recuperaron en los hermosos estampados de su línea masculina y sus telas sedosas que de hecho recuerdan el trabajo de Gianni. Versace lo ha hecho con aquel elemento que podía elevar cualquier traje al adjetivo de chulerío: los taches o estoperoles pero no en plan rockero sino en plan perloso en plan tex-mex. La idea de 'no uso bisutería pero si cromo' me encanta y lo ha dejado claro su última colección para Primavera 2012 que es una simplificación, una adaptación de la silueta de Gianni (menos refinada y menos puta, a mi parecer) a nuestra época. Y va a vender.
Retomando un poco aquello del 'Hit or Miss', el concepto de la colección fue el mar o más bien, figuras marinas. Las mujeres Versace de Donatella son sirenas y es genial volverlas a ver con sus pelos moviendose al caminar pero, no le he agarrado el punto a los horribles estampados de estrellas o marinos de muchísimos pases, ni la paleta de colores tan vomitiva de los mismos. No lo trago y punto. En vez de pensar en la vida marina, pienso en azulejos de baño.
Si nos vamos al Versace de Antaño, Gianni colaboraba con los artistas del momento para intervenir sus diseños y nos daba un colorín festivo en sus estampados, cosa que Doni como lider de una casa filántrópica debería hacer de vez en cuando. Aunque no la culpo con la cantidad de artistas aburridos y repetitivos de guerrilla que abundan hoy en día.
Ver la colección era escuchar mi mente maquinar un WOOOOW y luego un OUCH! Hay pases que me han parecido increibles como el segundo (mírenlos en Style.com) que lo lleva una negra y algunos de los trajes negros, aún cuando las modelos los llevan como si les pesara la vida. Ya se me estaba apagando la esperanza cuando los ultimos pases la traen de vuelta y es que el vestido que lleva Abbey Lee y Sigrid Allen (que cierra) me han parecido unas absolutas obras maestras y espero les dediquen muchos editos, se cagan de vulgares que me parecen absolutamente maravillosos y por los que me he quedado despierto hasta las 2am escribiendo estas cortas líneas. Gracias Donatella o la mente prodigiosa que lo haya diseñado por haberme emocionado tanto que me han hecho desvelar.
